Al final, no pudimos ver a La Oreja con Amaia Montero de vocalista. Lo que no sabíamos hasta este día es que el cambio no había sido para mal.
Y dicho esto, vamos a lo que fue el concierto, que no estuvo nada pero que nada mal. Era el inicio de Leir Martínez como vocalista de LOVG, y una cosa que no escapa a nadie cuando oye el disco de «A las cinco en el Astoria» es el enorme parecido de la voz de Leire con la voz que tenía Amaia en los primeros discos (cuando aún no hacía suspiritos, hipidos y ruiditos entre frase y frase). Y en directo pudimos comprobar que no se trataba de arreglos para forzar que la voz de Leire encajara en las antiguas canciones, sino que era su voz. El mayor logro de LODVG fue conseguir una voz muy parecida a la de su cantante anterior, pero sin todos los vicios que había ido cogiendo después. La voz de Leire nos encantó a todos, así como los otros 4 integrantes del grupo, a los que se nota muy unidos cuando actúan. Tocaron la mayor parte de las canciones del último disco, y nos regalaron algunas más de las clásicas.
¡Ah! y los de donuts nos regalaron unos 8 paquetes de donetes a la salida. Mmmmm …